La Policía Nacional ha empezado a tomar declaración a miembros de la Policía Local de Cáceres dento de las investigaciones por el robo de la pistola del jefe de los municipales, Benedicto Cacho, que fue el primero en declarar sobre lo ocurrido cuando entregó la denuncia. Según fuentes consultadas ayer por este diario, desde hace unos quince días se está citando a miembros de la plantilla para tomarles declaración. Se está preguntando tanto a mandos como a agentes, añadieron otros interlocutores, e incluso Cacho habría acudido una segunda vez. Antes también se tomó declaración al personal de limpieza de la jefatura de la Policía Local.

En los días en los que Benedicto Cacho estuvo ausente y en los se habría cometido el robo pasó por la jefatura en distintos turnos casi la totalidad de la plantilla. El jefe de la Policía Local comprobó que le faltaba la caja fuerte con su pistola cuando se incorporó a su puesto la mañana del martes 27 de febrero, había estado fuera desde la tarde del miércoles 21 de febrero. La plantilla de la Policía Local es de 144 trabajadores, de los que 124 son agentes y el resto mandos, además hay 16 en segunda actividad, según la propuesta de plantilla de personal del ayuntamiento incluida en los presupuestos de 2018.

Entre las preguntas que se estarían realizando a los miembros de la policía a los que se ha tomado declaración estarían qué hicieron durante los días en los que se pudo cometer el robo y si habían visto algo que les llamase la atención. Desde la Subdelegación del Gobierno, de la que depende la Policía Nacional, se aseguró ayer por la tarde que «no hay nada nuevo» en la investigación.

JORNADA / Preguntado también sobre posibles avances en las pesquisas, el concejal de Seguridad Ciudadana, Rafael Mateos, insistió en que es la Policía Nacional la que lidera la investigación en este momento y reiteró que «nosotros solo somos los denunciantes, nos robaron a nosotros». Mateos hizo estas declaraciones ayer por la mañana en una jornada técnica sobre drones organizada por el Ayuntamiento de Cáceres en la jefatura de la Policía Local y a la que asistieron alrededor de cuarenta agentes.

Por otra parte, la comisión de Economía del ayuntamiento dictaminará el próximo lunes una modificación en los presupuestos municipales para dotar de crédito la compra de un armero para la jefatura de la Policía Local. La inversión se cuantifica en 18.150 euros. Mateos anunció que se adquiriría el armero a los pocos días de denunciarse el robo de la pistola y que ya estaba prevista su compra antes de la desaparición de la caja fuerte con el arma del despacho de Cacho.

«Aunque estuviese prevista su adquisición, lo que ha ocurrido --con el robo de la pistola-- lo ha precipitado», comentó ayer José Luis Ruiz, delegado de CSI-F en la Policía Local. Ruiz mostró su satisfacción porque se atiende la demanda del armero, «una reivindicación histórica» del sindicato desde que se inauguró la jefatura hace dos décadas. Recordó que CSI-F ha demandado la adquisición del armero a todas las corporaciones y ha denunciado que los agentes se ven obligados a dejar sus armas en las taquillas al no disponerse de un armero con más seguridad donde guardarlas. Cacho, que dejaba su arma en una caja fuerte dentro de un armario de su despacho, estuvo en los días en los que se habría cometido el robo en Madrid, en una feria de seguridad, donde, entre otros materiales, se vieron armeros.