No sólo San Mateo, sino que también Santa María formará parte del recorrido del nuevo microbús urbano, servicio que será operativo desde el lunes y que se prestará con un vehículo provisional hasta que dentro de tres o cuatro meses esté el definitivo. Los concejales Belén Lozano y Raimundo Holgado y el jefe del servicio municipal de Inspección Técnica, Rafael Valiente, presentaron ayer el vehículo, que, a pesar de su denominación, sólo pasará por los hoteles de tres y cuatro estrellas que no están en el centro en épocas turísticas, fines de semana o coincidiendo con la celebración de congresos.

Lozano explicó que es un microbús para dar servicio no sólo al turismo, sino también a residentes del centro urbano y a los que tienen su trabajo en esta zona. La oposición municipal ha cuestionado su viabilidad y oportunidad, porque hay otras necesidades, mientras que el gobierno local argumenta que hay una demanda que justifica la prestación de este servicio.

Mientras que duren las obras en el entorno de Santa Clara, el microbús no podrá acceder a la plaza de San Mateo, por lo que por ahora comunicará el centro administrativo (Primo de Rivera y plaza de América) con las plazas de San Juan, Mayor y Santa María. Se aprovecharán varias de las paradas de otros recorridos y en algunas calles se pondrán postes para la espera de los usuarios, aunque, a diferencia de otras líneas, el vehículo sólo parará cuando el viajero lo demande alzando el brazo. El precio del billete es de un euro, superior al ordinario, que es de 60 céntimos, y el horario será de lunes a sábado de nueve y media de la mañana a dos de la tarde y de cuatro a ocho y media. Los domingos y festivos no habrá servicio por la tarde. El microbús tiene 16 plazas, y el definitivo será de 20.