El TSJEx ratifica, en una sentencia del 8 de marzo, que el Servicio Extremeño de Salud reanude las obras de la primera fase del nuevo hospital, paradas desde hace más de tres años. Tras varios desacuerdos, la Junta de Extremadura decidió en febrero del 2013 rescindir el contrato con la adjudicataria de las obras, la Unión Temporal de Empresas (UTE) formada por FCC, Joca y Placonsa. Lo hizo después de que esta solicitara hasta en dos ocasiones un modificado de presupuesto de 9 millones de euros cada uno.

La concesionaria no estaba de acuerdo con esta decisión y la recurrió en los tribunales, a los que pidió que se paralizara cautelarmente el proceso, con el objetivo de que el Gobierno regional no pudiera sacar a concurso la terminación de la obra hasta que no se resolviera este litigio judicial. Lo denegó primero el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo Número 1 de Mérida y lo ratificó después el Tribunal Superior de Justicia de Extremadura (TSJEx).

Ahora el TSJEx comparte los argumentos del juzgado y reitera que no ha quedado justificado que, de no aplicarse la suspensión cautelar que solicita la UTE, se vaya a crear un daño irreparable a las empresas que la conforman. Añade además que en este caso prevalece el interés general al particular, al tratarse de una infraestructura sanitaria que lleva años paralizada. Por primera vez las empresas hacen referencia en el recurso presentado a la complicada situación económica en la que se encuentran tras la rescisión del contrato y al daño que les puede provocar que la Junta retenga los 5 millones de euros en concepto de garantía que depositaron las entidades (deben hacerlo al haberse resuelto el contrato).

CONTRATACION PARADA A efectos prácticos esta sentencia viene únicamente a avalar el proceso de licitación que la Junta de Extremadura inició en junio del 2015. Sin embargo la contratación sigue parada. Y es que esta nueva adjudicación, que iba a servir para finalizar la primera fase --está construida al 91%--, ha terminado también en los tribunales. El Gobierno regional la adjudicó primero a la UTE Ortiz-Carija, pero la propuesta fue después excluida del concurso porque no presentó toda la documentación requerida en el plazo establecido.

El SES volvió a adjudicar la obra, esta vez a la UTE formada por San José y Magenta, por 12,6 millones de euros. Sin embargo la primera concesionaria ha recurrido su exclusión del concurso. La reclamación todavía no se ha estudiado, por lo que el proceso se encuentra de nuevo paralizado.

Todos estos trámites no hacen más que retrasar el inicio de las obras. El Gobierno autonómico esperaba que comenzaran a principios de año para que esta primera fase pudiera estrenarse a principios del siguiente. Esos plazos no se cumplirán porque, de momento, no hay plazos de cuando se reanudará la ejecución. La terminación de esta parte urge para poder trasladar allí los servicios que se prestan desde el hospital Virgen de la Montaña, que se encuentra muy deteriorado.

Mientras tanto la Junta de Extremadura acaba de anunciar que en los presupuestos regionales del 2016, aprobados ayer en la Asamblea, se contempla la inversión de 200.000 euros para la redacción del proyecto de la segunda fase. Hasta 2019 la Administración autonómica espera invertir 82,2 millones de euros en el hospital de Cáceres. "Es una buena noticia. Esto puede significar que en dos o tres años podemos tener hospital e incluso podría darse la circunstancia de que, si todo va bien, estuvieran terminadas a la vez las dos fases. Urge abrir el nuevo hospital para dejar de usar el Virgen de la Montaña", dijo el presidente del Colegio de Médicos, Carlos Arjona.