La Unión Temporal de Empresas formada por FCC, Joca y Placonsa, que fue adjudicataria de las obras de la primera fase del nuevo hospital, afirmó ayer a este diario a través de un escrito remitido por su abogado, Juan María Calero, que no ha pedido que no hubiera una nueva licitación ni tampoco ha impedido que las obras se puedan reanudar. Manifiestó, además, que el Tribunal Supremo no ha ratificado que el Servicio Extremeño de Salud (SES) reanude dichos trabajos porque éste no se ha pronunciado sobre este asunto.

Calero especificó que la UTE ha interpuesto un recurso contencioso contra la decisión del SES de resolver el contrato con su cliente, tomada en febrero del 2013, y que el mismo se encuentra en trámites ante el Juzgado de lo Contencioso número 2 de Mérida. "No se han practicado las pruebas, por lo que todavía no hay sentencia que declare si la resolución del SES fue ajustada o contraria al derecho", alegó el letrado.

El SES practicó una liquidación final de las obras realizadas por la UTE en donde estableció un saldo a su favor de 5 millones de euros. Explicó Calero que la UTE ha practicado otra liquidación que establece un importe beneficioso para la unión de empresas de 450.000 euros. "Ni el juzgado de Mérida ni el TSJ han fijado el importe de la liquidación de las obras. La sentencia que dicte el juzgado, que no lo hará antes de agosto, determinará su cuantía", prosigue el letrado. Esta decisión, además, podrá ser objeto de recurso ante el TSJ.

El TSJEx sí consideró, en una sentencia fechada el 8 de marzo, que no procede a la suspensión cautelar de la resolución administrativa que fija el importe de la liquidación final en 5 millones de euros, como pidió la UTE. Considera el tribunal que no procede la suspensión "porque no se causan daños irreparables".