Florencio Durán está jubilado. Pasa mucho tiempo en la estación de autobuses. Su vida laboral transcurrió entre andenes y vehículos. Fue empresario de una compañía de servicio regular de viajeros. Ha leído que el consistorio todavía adeuda unos 8 millones de euros a Busursa por el transporte urbano. Y ayer propuso que una solución para intentar abaratar costes es que se vea la posibilidad de que se cuente con las líneas regulares, que entran y salen por las principales vías de la ciudad, para que den servicio allí donde al autobús urbano le cuesta ir, además para evitar tener que comprar más vehículos porque en la estación "hay muchos coches parados".