En la calle Gil Cordero se repite muchas veces la misma escena: un vehículo estacionado en uno de los carriles de circulación, y una cola de coches en el otro. El tráfico en esta vía, una de las mas transitadas de la ciudad, casi siempre está afectado por esta práctica, a pesar de que la presencia policial suele ser habitual en esta calle.