La velocidad y la lluvia forman un dúo fatídico en la Autovía de Extremadura (Nacional V). Las curvas, los vehículos pesados y la impaciencia generan otro cóctel arriesgado en la Nacional 630. Estas son las principales causas de accidente de circulación en la red vial cacereña, según un primer análisis realizado por el nuevo jefe provincial de Tráfico, Ramón Ledesma. "Llama la atención cómo estos factores desencadenan muchos siniestros en carretera", explica el responsable, que llega con la intención de potenciar entre los cacereños lo que denomina "hábitos defensivos" a la hora de ponerse al volante. Según afirma, estas pautas pueden reducir los accidentes.

La red vial cacereña registró 552 percances a lo largo del 2003. Como ya es habitual, las calzadas con mayor incidencia fueron la Autovía de Extremadura, con 82 siniestros, y la N-630, con un total de 75. Los problemas en la primera se derivan curiosamente de la baja intensidad del tráfico. "El conductor ve pocos vehículos en su dirección. Esto le anima a pisar el acelerador y a disminuir la atención. Los efectos pueden ser drásticos, sobre todo durante las jornadas de lluvia, ya que la velocidad puede dar lugar al temido aguaplanning ", subraya Ramón Ledesma.

Este efecto se produce cuando el agua forma una película bajo las ruedas, que provoca un deslizamiento incontrolado del coche por la calzada. El riesgo aumenta con neumáticos gastados y al circular a altas velocidades. En cualquier caso no es aconsejable frenar ni acelerar bruscamente. "Pedimos una vez más a los conductores que extremen las precauciones para evitar este tipo de incidencias", advierte el jefe provincial de la DGT.

N-630: EFECTO CONTRARIO La situación da un giro de 360 grados en la N-630. La alta densidad circulatoria, el doble sentido, el exceso de curvas en ciertos tramos y la línea continua obligan a disminuir la velocidad. "La gente se impacienta y la inquietud anima a algunos conductores a forzar adelantamientos ajustados", explica Ledesma. Consecuencia: la Nacional 630 mantiene niveles muy altos de siniestralidad.

Frente a ello, el nuevo jefe provincial de Tráfico hará especial hincapié en la seguridad vial para inculcar mejores pautas en la conducción. "Si adoptamos hábitos defensivos podemos evitar muchos accidentes, por ejemplo circular cerca del arcén derecho para dejar margen a posibles errores del resto de conductores, o tener una actitud preventiva en los cruces. En definitiva, anticiparse al fallo del otro, pensar siempre que puede producirse un accidente, pero al mismo tiempo conducir con tranquilidad y serenidad", matiza.