Tres días después de haber participado en el cásting para dar vida a Niki Lauda --el campeón austriaco de fórmula 1 que se abrasó vivo en un accidente que estuvo a punto de costarle la vida--, Daniel Brühl iba conduciendo ("adelantando camiones" para ser exactos) con su novia cerca de Cadaqués. El móvil le sonó tres veces seguidas. "Le dije a mi chica que teníamos que parar porque nadie se molesta en llamar tres veces para decir que no has conseguido el papel". Efectivamente. El director Ron Howard (Apolo 13 , Una mente maravillosa ) le acababa de elegir para protagonizar Rush estreno 20 de setiembre y ponerse en la piel del mítico piloto en su histórico duelo con el británico James Hunt. "Me alegré y me acojoné", revela Brühl (Barcelona, 1978), consciente de que ha hecho el papel de su vida.

--Trabajó con Tarantino en Malditos batardos , pero siempre le hemos visto en películas pequeñas: Eva , Salvador , Good Bye, Lenin! ¿Es pronto para verle con un Oscar?

--(Silencio) Periodistas de EEUU me lo dicen. Eso significa que he hecho bien mi trabajo. Pero, de verdad, no pienso en premios. Soy supersticioso.

--Se reunió con Lauda para preparar el personaje. ¿Con qué tipo de hombre vio?

--Con uno muy poco diplomático. Cuando le llamé me dijo: "Vente a Viena, pero trae equipaje para un día, no vaya a ser que no me gustes". Por suerte le caí bien. Hablamos mucho. Me contó cosas íntimas.

--¿Por ejemplo?

--Cómo superar los miedos. Me contó que después del calvario que pasó en el hospital tras el accidente tuvo un ataque de pánico. Se metió solo en un cuarto a analizar ese miedo. Así que yo dije: voy a analizar también mis miedos.

--¿Cuáles son?

--Soy hipocondríaco.

--¿Y eso cómo se supera?

--Yendo mucho al médico. Cuando me ve, ya se ríe. Voy de vez en cuando (risas). Interiormente me he muerto de todo. No se lo puede ni imaginar.

--Pero sigue fumando...

--Cada vez menos. Además, lo voy a dejar. Ir al médico me tranquiliza. Y, ¿sabe?, estoy saliendo con una psicóloga y eso también me ayuda a superar mis miedos.

--¿Entiende esas profesiones en las que trabajar supone arriesgar la vida? ¿No le parece algo estúpido?

--Yo no lo haría, pero sí que admiro el coraje de estos hombres. ¿Estúpido? No, en absoluto. Ellos aman lo que hacen y eso es totalmente legítimo. He hablado con muchos pilotos, no solo con Niki Lauda, y todos me parecen muy inteligentes. Los pilotos de antes eran caballeros, gladiadores.

--Hizo un curso de fórmula 3.

--Sí, en Montmeló. Y otro en EEUU con Chris Hemsworth el actor australiano interpreta al piloto James Hunt, el eterno rival de Lauda en los circuitos. En una de las pruebas, yo iba en un Ferrari y se soltó una rueda. Tuve miedo porque por un momento no pude controlar el coche. Pensé que a lo mejor el equipo lo había hecho a propósito.

--Habrá crisis, pero usted no para. En septiembre estrena Rush . Y después, un filme sobre Wikileaks donde da vida a la mano derecha de Julian Assange.

--Sí, la verdad es que recibo buenas ofertas. Good Bye, Lenin! me marcó como buenazo, así que es interesante ver cómo me hago mayor. Noto que ahora me llegan papeles de hombre (risas).

--También escribe. Ha publicado Un día en Barcelona , un libro que hace las veces de guía sentimental de la ciudad.

--Me divirtió bastante, pero, vamos, no lo considero literatura. Quiero escribir otro libro en esa línea. A ver cuándo lo hago... Este año, imposible. Y el que viene, tampoco.

--También es autor de un guion que tiene guardado.

--Es bastante malo, hay que mejorarlo. No sé si seré capaz o contrataré a un guionista. Es una historia personal que trata sobre la amistad y la envidia.

--Es propietario de un bar de tapas en Berlín. Habrá notado cómo acuden a Alemania muchos jóvenes españoles en busca de una oportunidad.

--Sí, es triste. Pero en esa gente noto esperanza. Hace falta tener coraje para ir a otro país a buscar trabajo. Me da pena que haya conflictos entre mis dos países: Alemania y España.

--En Rush muestra la brutal competitivodad entre Lauda y James Hunt. ¿En el mundo de la interpretación existe también esa ferocidad?

--Tengo un amigo alemán que también es actor y siempre coincidimos en los mismos cásting. Incluso en el de Rush . Digamos que hay momentos críticos, pero los superamos con cariño y respeto.