Por «meditar, de manera directa y personal, sobre la propia vida ayudando a vivirla con mayor lucidez y consciencia. Un buen ejemplo de filosofía de alto estilo capaz de interpelar a cualquier clase de lector». Así valoró ayer el jurado la obra La resistencia íntima: ensayo de una filosofía de la proximidad (Acantilado ), del filósofo Josep Maria Esquirol (Mediona, 1963), al otorgarle el Nacional de ensayo, dotado con 20.000 euros y que concede el Ministerio de Cultura.

Para el profesor de filosofía y pensamiento contemporáneo de la Universitat de Barcelona, este galardón «premia a los lectores del libro, que ha funcionado porque ellos lo han recomendado». Uno de los ejes de La resistencia íntima es «la idea básica de la intemperie humana». «Estamos al descubierto y, por lo tanto, hay muchas cosas que nos erosionan, nos disgregan. Ante eso, el gesto humano por excelencia es protegernos y eso significa amparo, resistencia, gestos que implican calidez, confianza, solidez, como el estar en casa, un espacio cálido que nos permite recuperar fuerzas y fortalecernos», explica.

«No intento dar recetas ni ofrecer planteamientos fáciles para solucionar las cosas, porque las más graves no tienen solución, sino explicar las cosas de forma que ayude a afrontar la dificultad con más claridad», añade. Por ello, reivindica «la cotidianidad del lenguaje, más cálido y menos formal y abstracto», para «poner atención en elementos que no son novedad y que la gente ya vive». «No descubro nada nuevo, sino que destaco cosas que en esta sociedad espectacular se suelen arrinconar», añade. H