Sucede de vez en cuando en el deporte: un entrenador ni siquiera llega a iniciar la temporada con un equipo por divergencias casi siempre con la junta directiva. Es el caso de Ricardo Vasconcelos, que no dirigirá más al Alter Enersun Al-Qázeres Extremadura, el equipo al que llegó hace un año. Ambas partes han rescindido este martes el vínculo que las unía «de mutuo acuerdo», según la versión oficial, aunque todo señala a una dimisión del técnico portugués.
El terremoto llega apenas seis días antes de arrancar la pretemporada de cara a la Liga Femenina Endesa, en la que el conjunto cacereño volverá a luchar por la permanencia. Ya se busca un nuevo responsable del banquillo y el principal nombre que ha surgido es el deJacinto Carbajal, una persona fundamental en la historia del club (dos ascensos a laLF y una clasificación para la Copa de la Reina). Hace dos años dejó el cargo y desde entonces ha acumulado un ascenso más a la máxima categoría, con el Campus Promete, aunque su trabajo actual está en la Liga Femenina 2 con el Club Baloncesto Almería. De ese contrato tendría que liberarse para que las negociaciones pudiesen culminar, quizás con los almerienses pidiendo algún tipo de compensación. También se manejan otras opciones, como las de Chiqui Barros o Miguel Ángel Ortega.
LA INTRAHISTORIA /Sobre la noticia de la marcha de Vasconcelos, adelantada por este diario, han proliferado multitud de explicaciones. La versión más extendida es que el técnico exigió tener a su lado a dos personas de su confianza como preparadora física y fisioterapeuta. Esta última persona era José Moreno ‘Perry’, que ha estado seis temporadas ejerciendo ese puesto con distintos entrenadores. En principio, el club habría admitido su petición, asignándole además un segundo entrenador con el que pareció estar conforme, Dani Díaz.
Esto ocurrió hace unos meses, cuando se pactó la renovación de Vasconcelos. Sin embargo, en una reciente reunión de la junta directiva se decidió que la contratación de la preparadora física y la continuidad de Moreno no podían acometerse por motivos económicos.
Eso sentó ‘como un tiro’ al técnico luso, que había prometido a esas dos personas que estaría con ellos en el equipo o se marcharía. Y es esto último lo que ha pasado.El club, muy contento con su trabajo, ha intentado convencerle de que cambiase de opinión ofreciéndole varias fórmulas alternativas, pero no lo ha conseguido.
Como es habitual, el Al-Qázeres le desea «suerte en lo profesional y en lo personal» y se le agradece «enormemente el tiempo, esfuerzo y trabajo dedicado, esperando que en un futuro nuestros caminos se vuelvan a cruzar».
El presidente de la entidad, Alfonso Sánchez, lamentó que no se hubiese llegado a un acuerdo para que el entrenador siguiese y comentó que «me hubiese gustado que Ricardo fuese quien dirigiese esta plantilla, que la ha confeccionado él. Es un gran entrenador y una excelente persona. Me deja un buen recuerdo».
También se mostró preocupado porque lo sucedido «puede repercutir en el equipo» con tan poco tiempo de adaptación al nuevo entrenador, que espera «cerrar en 24 o 48 horas como máximo». «Tiene que ser alguien que amolde rápidamente a nuestro proyecto», apostilló.
