El Atlético de Madrid apura contra la Roma su última ocasión en esta edición de la Liga de Campeones, en una situación límite, en la que sólo le vale ganar, ganar y esperar un favor del Qarabag, con Fernando Torres de vuelta al once junto a Antoine Griezmann en la delantera.

Victoria o eliminación. No hay otro cálculo posible ya en la quinta jornada del grupo C del torneo contra el conjunto italiano, imponente desde el 0-0 con el que comenzaron los dos equipos en el Olímpico, un choque que predecía todo lo contrario de lo que pasó después: el Roma es el líder y el Atlético se asoma el abismo.

El conjunto de Simeone también necesita la victoria en la última jornada ante el Chelsea en la última jornada y que, a la vez, el Qarabag logre algún punto ante ingleses o italianos. Es una combinación inesperada, más que complicada, pero a la que se agarra el Atlético.

Ni el juego ni las ocasiones, a la vez, acompañan al Atlético en la actualidad, con el foco, además, dirigido desde la afición hacia Griezmann, pitado el pasado sábado entre las declaraciones sobre su futuro y la peor racha goleadora con la camiseta rojiblanca: ocho partidos consecutivos sin un solo tanto.

Yannick Carrasco entrará en la banda izquierda, con Thomas y Koke por el medio, con Saúl Ñíguez por la derecha y con Gabi como suplente, como también lo será Diego Godín en el centro de la defensa, que estará formado por Giménez y Lucas . Stefan Savic es baja por sanción. Filipe Luis vuelve tras su lesión.