La Champions se estrena a lo grande en Dortmund, en el impresionante escenario del Signal Iduna Park, donde Borussia y Barcelona (21.00 horas) se medirán este martes con la duda del argentino Leo Messi, que ya tiene el alta médica y ha entrado en la convocatoria, pero cuya participación no se decidirá hasta el final, como explicó Ernesto Valverde.

Será una buena piedra de toque para los azulgranas, que se han mostrado tan resolutivos en casa como dubitativos cuando juegan como visitantes.

La principal duda es Messi. El argentino ya tiene el alta de su lesión en el sóleo y ha participado en las dos últimas sesiones con el equipo, aunque difícilmente Valverde arriesgará para ponerlo de salida, después de un mes y medio de baja por una lesión en el sóleo de la que recayó en la mitad de la recuperación.

Sin Messi, el Barça ha ido trampeando, y ha tenido que ir improvisando alineaciones en ataque por las lesiones de Luis Suárez (ya recuperado) y Dembélé (aun convaleciente).

La suerte para el barcelonismo es que de este modo, dos jugadores que no estaban en ninguna de las quinielas -Carles Pérez y sobre todo Ansu Fati- han emergido para ofrecer aire fresco al equipo.

En Dortmund, el Barça tiene que tener mucho cuidado ante el potencial del equipo de Lucien Favre, donde sobre todo Paco Alcácer, exbarcelonista, tendrá muchas ganas de reivindicarse y continuar con su impresionante racha de diez goles en los últimos ocho partidos.

Pero también con el imponente escenario y con lo que se crece el Borussia ante sus aficionados. El Barça lo sabe y le puede recordar a la intensidad del Liverpool en aquella fatídica semifinal de Champions jugada en Anfield con la que se despidió el curso pasado de Europa.

Ante los alemanes, y con Messi como principal duda, Valverde podría volver a contar con Sergi Roberto como lateral diestro o mantener la defensa que alineó ante el Valencia con Semedo Piqué, Lenglet y Jordi Alba.