"Con las federaciones no ha habido nunca ningún problema. Demostramos con hechos, no con palabras, que las territoriales son la principal herramienta de la dirección general desde que nos hicimos cargo de la gestión. El año pasado (por el año 2011) les quitamos un 20 por cien, la que menos en España. A las federaciones les incrementamos ahora el 20 por cien (por el 2012)".

Antonio Pedrera, director general de Deportes, respondía así en una entrevista realizada por este diario el pasado octubre a una pregunta sobre la relación entre las territoriales y la Junta de Extremadura.

Desde entonces, lo más sobresaliente ha sido el conficto de la de fútbol, aunque ejerciendo de mediador no por solamente razones económicas (ahora en pleno proceso electoral), además de algunas reuniones puntuales como mantenida con la de atletismo, una de las que más prestigio goza entre las 44 existentes por la cantidad de buenos resultados que, históricamente, ha conseguido para la comunidad autónoma.

Sin embargo, ya durante 2012 se produjo un hecho sin precedentes y que, en realidad, ha marcado un antes y un después: Extremadura no estuvo presente, como selección, en el nacional por autonomías celebrado en Cataluña. Y todo ello había sido en función del recorte de gastos que se tuvo que operar en la propia federación.

En realidad, a nivel nacional, las federaciones que gozan de más salud son las que disponen de patrimonio propio y pueden llenar sus arcas exhibiendo a sus selecciones. Es el caso, por ejemplo, de los millonarios bolos que realiza la Federación Española de Fútbol gracias al éxito de La Roja con el Mundial y los dos títulos europeos. Sucede igual con la federación española de baloncesto y con la de tenis, aunque este último caso depende mucho de la trayectoria en la Copa Davis y de si las eliminatorias se disputan en España o fuera.

Aparte del fútbol, que ha renunciado a la ayuda, el baloncesto solo recibe el 15,7% del presupuesto total y el tenis el 14,07 por ciento.