Son las cinco de la tarde en el Centro de Tecnificación de la Ciudad Deportiva de Cáceres. Hace calor. En la puerta, Víctor Luengo, histórico educador-entrenador-cómplice-amigo de los atletas, saluda a casi todos los deportistas. "¿Oye, corres hoy?". "Sí, el 800", le responde el jovencito mientras le abraza. Hay respeto por quien ha hecho del Campo Arañuelo un auténtico santuario del atletismo a través de la integración.

Dentro, en la tribuna hay ya expectación. A ello ayuda que está por allí Canal Extremadura TV, que daría en diferido el evento con Rodrigo Morán y el polifacético Pedro Talavera en los comentarios técnicos. Es el Campeonato de Extremadura de Atletismo al aire libre, un acontecimiento especial para todos, más de 200 deportistas de 22 clubs diferentes. También para Paco Carrapiso, el presidente de la Federación Extremeña de Atletismo, que se afana por imbuir a todos el espíritu deportivo que suelen inspirar estas citas. "En el atletismo apenas hay problemas, con alguna excepción", dice.

Excepto el 10.000 y la marcha (cuatro saltos, cuatro lanzamientos y 18 carreras) todo el mejor atletismo en liza. Espectáculo televisivo y ambiental al margen, hay varios nombres propios que sobresalieron en una tarde plena de competitividad. Enrique Vázquez Cobos (Perceiana) se llevó las pruebas de 100 (10.66) y 200 (21.58) con doble demostración de fuerza y talento, con mejor marca personal en ambas.

La réplica en chicas la representó Lucía Sánchez (Diocles de Mérida), que igualmente se exhibió en los 100 metros (12.44) y salto de longitud, superando los cinco metros, una marca muy a tener en cuenta, aunque no mejoró sus 5.40 que la hace ser, como cadete, una de las principales referencias extremeñas de cara al futuro.

En lanzamientos, el más destacado fue Miguel Angel Durán (componente del Asselou Narón de Asturias y natural de Alburquerque) que lanzó más de 60 metros, con lo que consiguió mínima y mejor marca personal que le valió para acceder al nacional promesas que será en Mataró a finales de mes. En saltos Talavera aporta un nombre: Pablo Benítez (Olivenza), que con 7,20 es el campeón regional y se confirmó como previsible sucesor de los ya históricos Florentino Galaviz o Iván Román. Pero hay más, mucho más.