I love this game... Tras ver el partido que disputaron ayer los directivos y el equipo técnico del Cáceres 2016, uno rápidamente llena de valor lo que significa este deporte. El baloncesto tiene muchas caras. Sin duda, la más popular es la de los jugadores, esos que ocupan las portadas de los periódicos, esos que reciben las palmadas de los aficionados cada vez que salen del pabellón tras un partido... Sin embargo, para que el proyecto tome forma existen muchos pilares fundamentales sin los que todo esto no sería posible. Ahí están los directivos, los entrenadores, el médico, el ´fisio´, el preparador físico, el jefe de prensa...

Fueron ellos los que tomaron el relevo sobre el parquet y los que dejaron bien clarito que lo de las canastas deben dejárselo a otros. Pero divertirse, vaya que se divirtieron.

Presidir un club de baloncesto no significa que tengas que ser bueno en esto de meter canastas. Visto lo visto parece más bien todo lo contrario. José Manuel Sánchez apareció con una apretadísima camiseta donde se leía ´Magic Pepe´. Como gracia no estuvo nada mal, pero claro viendo su juego puede llegar a ofender al propio mito de los Lakers Earving Johnson, con el que compartió por unos minutos apodo.

El equipo de los directivos tenía, aunque sólo fuera por edad, una clara desventaja. Pedro Núñez, Eduardo Chacón, César García... voluntad toda, pero si no fuera por la mano que de vez en cuando le echaba la mesa subiendo más puntos de los debidos hubieran sido barridos por un equipo más joven.

A todo esto, ´Piti´ Hurtado dejó con carácter circunstancial el banquillo y ordenaba como base el juego de los suyos. Recibió mil personales de Pedro Núñez y se marchó al banquillo.

Entretanto, los jugadores iban asomándose uno a uno a la pista y sólo acertaban a sonreír ante el espectáculo de sus entrenadores y directivos. Curiosa conversación fue por ejemplo la que protagonizaron Piti Hurtado y Tomás Bellas, donde el base le inquirió al técnico: "¿No sales?" , a lo que respondió Hurtado: "El entrenador no me saca". Silencio momentáneo y más risas entre tiros que no tocaban aro... Lo dicho, I Love this game.