Unas horas después del estreno del equipo de Pellegrini en el Bernabéu, Florentino Pérez reapareció ante la prensa para analizar todos los acontencimientos de las últimas semanas. En su repaso, no olvidó referirse al fichaje de Ibrahimovic por el Barcelona, una contratación que aseguró que le viene muy bien al club blanco. El presidente del Madrid no quiere guerras con Joan Laporta y entiende las declaraciones del mandatario azulgrana tras los fichajes de Kaká y Ronaldo como "cosas que se dicen desde la pasión y no las tengo muy en cuenta".

El sábado se cumplen dos meses desde que llegó a la presidencia. Y Florentino parece estar en plena forma. Después de varios días sin comparecer ante los medios, Florentino defendió su modelo, que admite haber copiado de Santiago Bernabéu. "Pagó una salvajada por Di Stéfano e hizo un gran estadio cuando el cemento se traía de estraperlo. Ese modelo covirtió al club en el mejor del siglo XX. Lo vi de pequeño y eso es lo único que funcionó. He vuelto para que al final del siglo otro recoja el título de mejor club del siglo XXI", declaró Pérez en el Foro Ferrándiz-AS.

GRANDES MAQUINAS Como si el efecto de sus palabras pudiera hacer pensar a alguno en la grandilocuencia del mensaje, Florentino salió inmediatamente al quite. "Se habla de prepotencia y arrogancia, pero no somos arrogantes", añadió el dirigente blanco. Defendió su política de fichajes frente a la de la pasada temporada por la rentabilidad de los jugadores. "No hay otra solución. De no haberlos traído, los contratos de los patrocinadores se renovarían a la baja el lugar de al alza. El anterior era un camino equivocado. Este es un modelo empresarial que apuesta por las grandes máquinas", manifestó Pérez.

Y llegó el turno de Ibrahimovic, una bendición para solapar los más de 200 millones que lleva gastados Pérez. La contratación del jugador sueco ni siquiera despertó una cierta revancha en Florentino por aquello del modelo imperialista del que habló Laporta tras el dispendio con Kaká y Ronaldo. "Al Madrid le vienen bien que lleguen grandes jugadores de otras Ligas. Los mejores ya en la nuestra. Le vendrá bien desde el punto de vista deportivo y de rentabilidad. No estoy ofendido por las críticas. Tengo buena relación con el presidente del Barcelona y hay que juzgarle por el comportamiento que ha tenido conmigo, que ha sido exquisito", manifestó Pérez.

En los aspectos de casa, Florentino lamentó que aún no hayan salido los descartes, lo que achaca en parte a la estrategia de los primeros fichajes. "Realizamos contrataciones estratégicas muy rápidamente y eso nos ha llevado a una sobredimensión absurda de la plantilla hasta el punto de tener 29 jugadores. Aún no hemos conseguido que los que no van a tener oportunidades salgan".