La etapa inaugural de la Vuelta, una contrarreloj por equipos de 27,7 kilómetros y que tendrá por escenario un circuito de León y sus alrededores, será el primer test importante de los muchos candidatos al podio.

El trazado no es excesivamente duro, es de fuerza, ideal para los corredores que no les gusta utilizar mucho el cambio. El principal problema será el posible viento que sopla en algunas zonas del trazado y el alto de tercera categoría, en el kilómetro 8.

El intervalo de salida será de 4 minutos y como suele ser habitual el tiempo lo marcará el quinto corredor del equipo. La perdida máxima entre el equipo ganador y el peor clasificado será de tres minutos.

Para el triunfo y para lograr el liderato son muchos los candidatos, especialmente algún componente del Liberty Seguros, además del Illes Balears, el Phonak, Saunir Duval y Comunidad Valenciana/Kelme.