Las cuatro medallas de oro de Gemma Mengual y sus compañeras ya no son el único metal que reluce en el medallero español del Campeonato de Europa de natación. Rafael Muñoz, de solo 20 años, añadió un prometedor bronce al botín en una vertiginosa prueba de 50 metros mariposa en la que se batió la plusmarca europea, lo que ensalza aún más la gesta del joven cordobés. Sus 23.60 segundos suponen el quinto récord de España en lo que va de Europeo, uno de ellos logrado el martes por él mismo en esta prueba.

Muñoz, entrenado en el CAR de Sant Cugat por Joan Fortuny (que dirige también las brazadas de Erika Villaécija), estaba orgulloso de "acabar tercero en una carrera en la que se ha batido el récord de Europa y se ha nadado cerca del récord del mundo". "Quería subir al cajón con los más grandes de Europa y ya casi lo soy", dijo satisfecho, antes de confesar que sus entrenamientos están enfocados a Pekín, donde se nadarán los 50 mariposa, sino los 100.

El nadador andaluz, sin apenas palmarés internacional (empezó a destacar en el Mundial de Melbourne del pasado año), supo que tenía medalla nada más tocar la pared, ya que se encendió la bombilla de su calle. "He visto el led iluminado, pero de cerca no distinguía el color, no sabía si era bronce o plata. Fue bronce y no deja de ser una grata sorpresa y una gran felicidad para mí".

Menos feliz acabó Aschwin Wildeboer en los 100 metros espalda. Se desfondó en los últimos 25 metros de la final y hubo de conformarse con la cuarta plaza.