La Unión Ciclista Internacional anunció hoy a través de un comunicado medidas de antidopaje sin precedentes para el Mundial de Stuttgart, que se disputará en la ciudad alemana de 26 a 30 de septiembre.

Estas medidas, según informa el comunicado, no solo servirán para detectar casos de dopaje, sino también para prevenir que los ciclistas se tomen sustancias prohibidas.

Durante el periodo de preparación de los ciclistas la UCI habrá tomado las siguientes acciones:

- Por lo menos 120 pruebas antidopaje fuera de la competición entre los ciclistas que participen en el Mundial (el año pasado se realizaron 27).

- Alrededor de 400 pruebas entre los mismos ciclistas durante cualquier competición.

- Se enviará a los presidentes de las federaciones ciclistas de cada país una petición formal, donde se les exigirá realizar pruebas antidopaje entre los ciclistas que hayan elegido para el Mundial de Stuttgart. Durante el Mundial de ciclismo, la Unión Ciclista Internacional aplicará esas medidas:

- Un 25% de aumento de las pruebas antidopaje en comparación con las que se habían realizado en el mundial anterior.

- Se examinarán también los ciclistas que ocupen los cuatro primeros puestos de la clasificación final y cuatro adicionales (el año pasado eran dos).

- Como mínimo 30 pruebas de sangre durante el evento.

- Almacenamiento de muestras de sangre para que, cuando se realice la prueba (posiblemente a finales de este año), se pueda detectar si el ciclista ha tomado hormonas de crecimiento.

-Alrededor de 100 controles sanguíneos a primera hora de la mañana. Estas muestras servirán para prohibir la salida a algunos de los ciclistas y mejorar el objetivo de los controles antidopaje.