Uruguay jugará el próximo domingo la final de la Copa América, después de 12 años sin hacerlo, tras vencer este martes a Perú por 0-2 en un partido marcado por la compacta labor colectiva de la selección que dirige Óscar Tábarez y al oportunismo de Luis Suárez, autor de los dos goles en los minutos 53 y 57. El conjunto uruguayo disputará la final con el ganador del encuentro Paraguay-Venezuela, que se juega este miércoles. El partido entre Uruguay y Perú ha estado muy igualado, ya que la selección peruana lo equilibró con temple, mucha dignidad y dos jugadores de gran categoría como son Paolo Guerrero y Juan Vargas. Celestes y blanquirrojos, dos equipos muy parecidos tácticamente, han jugado un primer tiempo físico y muy intenso, pero de pocas luces y escaso vuelo futbolístico. Uruguay ha aportado rudeza defensiva y las jugadas de Diego Forlán y de Suárez, mientras que Perú se ha mostrado luchador. Uruguay ha ganado a su ritmo. No ha necesitado variar el guión dibujado por Tabárez aunque los goles llegasen en la segunda parte. Como acostumbra, la celeste no necesitó elaborar para crear y ganar. Siempre al límite, ha mantenido a raya a una Perú superada por el acontecimiento más importante de su era moderna y que solo ha tenido ocasiones a la desesperada en la recta final del partido. Vargas ha estado siempre controlado y ha acabado desesperado y por ello expulsado. Durante buena parte del duelo no ha habido centro del campo y a Perú se le ha hecho muy largo el campo, hasta el punto de no divisar a Fernando Muslera, que ha vivido su partido más cómodo del torneo tras ser el héroe en la tanda de penaltis de cuartos de final ante Argentina. Perú ha querido competir y ha perdido la batalla ante un experto rival que ha sido más inteligente y no ha desperdiciado oportunidades. El conjunto peruano se jugará el tercer puesto ante el derrotado del Paraguay-Venezuela. Mientras, Uruguay está de fiesta. Fue cuarta en el Mundial y aunque empezó está Copa con dos empates seguidos, reaccionó y disfrutará de la gran fiesta del fútbol el próximo domingo en el estadio Monumental de Buenos Aires. Hacía 12 años que no jugaba esta final. La última fue en la edición de 1999, en la que perdió 0-3 con Brasil, con dos goles de Rivaldo y uno de Ronaldo. El equipo celeste es, junto a Argentina, el máximo ganador de la Copa, con 14 trofeos cada uno. Ahora tienen la oportunidad de superar a la albiceleste.