La oposición al proyecto de la mina de uranio en la sierra Suroeste de Extremadura movilizó ayer a 1.500 personas en Zahínos para mostrar su repulsa y para recalcar que la paralización temporal no es la solución definitiva. De hecho, también demandan impedir la investigación y posible apertura de la mina.

Según ha informado la plataforma ciudadana Dehesa sin Uranio a la agencia Efe, se manifestaron junto a los propietarios de tierras afectadas y vecinos de la comarca para recordar que está pendiente la revocación del permiso de investigación concedido por la Junta de Extremadura a la empresa Qbis Resources S.L. para buscar uranio en la zona con el objetivo de explotar una mina.

El proyecto afectaría a los municipios pacenses de Higuera de Vargas, Jerez de los Caballeros, Oliva de la Frontera, Villanueva del Fresno y Zahínos.

Para Dehesa sin Uranio, esta explotación supondría "una bomba de relojería en nuestros campos que reventará el presente y enturbiará nuestro futuro y el de nuestros hijos".

Asimismo, ha lamentado que aún hay quien no ve la "gravedad" a pesar de haber reclamado la paralización del proyecto al presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, y haber ido hasta Cuacos de Yuste para elevar la queja al rey Felipe VI durante la celebración del premio Europeo Carlos V.

Por último, han asegurado que continuarán manifestándose para parar este "despropósito".