El coordinador general de IU en Extremadura, Pedro Escobar, no cree que la "alternativa" en la empresa pública GPEX sea "mandar a 600 personas a la calle" y ha confiado en que se celebre una reunión entre los tres grupos parlamentarios para abordar el tema del sector público extremeño.

Escobar, que ha acudido a la Asamblea de la Confederación Empresarial Española de la Economía Social (CEPES) Extremadura celebrada en Cáceres, se ha referido así al anuncio de la Junta de Extremadura de extinguir los contratos de 620 trabajadores de la empresa pública GPEX el próximo 31 de diciembre.

No serán renovados porque su intención es garantizar la viabilidad de esta sociedad, a juicio del consejero de Administración Pública, Pedro Tomás Nevado-Batalla, "sobredimensionada", e ir contratando según las necesidades.

En declaraciones a los periodistas, Esobar ha señalado que es preciso que "los tres grupos parlamentarios se sienten" a analizar la situación, no solo de GPEX, sino de todo el sector público extremeño, tanto empresas como consorcios y fundaciones.

"Hay que ver qué es lo que hay, las encomiendas y las funciones que están desempeñando", ha indicado Escobar en alusión a las empresas públicas.

En su opinión, "si los trabajadores están ahí es por algo", con lo que habrá que valorar "cuándo se les contrató y con qué objetivo" aunque "sigue siendo perfectamente justificado que sigan haciendo su trabajo".