El consejero de Sanidad y Servicios Sociales, José María Vergeles, ha confirmado este lunes que Extremadura votará a favor del cierre perimetral de todas las comunidades en Semana Santa, pero “está discutiendo el resto de criterios”, que incluyen el adelanto del toque de queda a las 22 horas y un límite de cuatro personas para las reuniones. El plan elaborado por el Ministerio de Sanidad para la Semana Santa se someterá a consideración de las autonomías el próximo miércoles en el Consejo Interterritorial de Salud y al respecto, Vergeles ha insistido en la necesidad de consensuar “al menos un par de medidas” que sean comunes para todo el territorio nacional.

Así, ha señalado que Extremadura votará a favor de que todas las comunidades se cierren perimetralmente para evitar los desplazamientos innecesarios. Sin embargo, Salud Pública está estudiando si aplicar o no el resto de medidas, que supondrían volver atrás en una desescalada que acaba de iniciarse cuando Extremadura se mantiene como la comunidad con menor incidencia del país: 42 casos por cien mil habitantes este domingo.

Respecto al toque de queda, que se adelantaría de las 23.00 horas actuales a las 22.00, Vergeles ha dicho que todavía “no está en disposición” de pronunciarse. Como ya se sabe, la medida ha generado críticas y el rechazo del sector de la hostelería extremeño al completo, que de nuevo volvería a perder el servicio de cenas.

El consejero sí ha confirmado que para continuar en la estrategia de “adelantarse al virus” y detectar posibles casos asintomáticos, Extremadura realizará cribados masivos y voluntarios en los días previos y posteriores a los días clave de la Semana Santa y el puente de San José. Estas pruebas se realizarían en los puntos establecidos habitualmente para ello en cada localidad y la persona solo tendría que aportar su tarjeta sanitaria.