Frente común extremeño para reclamar ante Bruselas una Política Agraria Comunitaria (PAC) que garantice las rentas a los 80.000 agricultores y ganaderos de la región que se benefician de ellas cada año y que no deje fuera de las ayudas a cultivos importantes para la comunidad autónoma como el tabaco, el viñedo y la aceituna de mesa, que más allá del año 2013 no tendrían ningún tipo de subvención según un primer borrador de la PAC para el período 2014-2020, que prevé también un techo máximo anual de 300.000 euros a las ayudas. La Consejería de Agricultura, Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Energía, tiene previsto reunirse en octubre con representantes del sector agrario y con PSOE e IU para "fijar, lo antes posible, una postura común sobre la reforma de la Política Agraria Comunitaria", dado que el comisario europeo de Agricultura, Dacian Ciolos, presentará el 12 de octubre en Bruselas la propuesta de reforma de la PAC. Se trata de "marcar las líneas rojas de esta reforma para conseguir que atienda las necesidades del sector agrario extremeño", según aseguró ayer el Ejecutivo regional.

El consejero extremeño del ramo, José Antonio Echávarri, insistió ayer en el Parlamento regional sobre la importancia de que "vayamos todos de la mano a Bruselas con una postura común y fuerte", una llamada que también realizó a la par el lider de los socialistas extremeños, Guillermo Fernández Vara, y que consideran necesaria las organizaciones agrarias.

En este sentido, Echávarri explicó que la postura de la consejería respecto a la reforma de la PAC pasa porque no se recorte el presupuesto (el borrador fija una reducción del 12%); porque no se ponga en marcha "la tarifa plana para que todas las hectáreas cobren lo mismo, ya que el sistema productivo del tomate o del tabaco no tiene nada que ver con la ganadería, el viñedo, el olivar o los frutales"; y porque se incluyan ayudas para el tabaco, el viñedo y la aceituna de mesa, cultivos que quedan excluidos de cualquier bonificación según el borrador.

En ese primer documento de reforma aparece recogido también que quienes obtengan 150.000 euros en ayudas recibirán un 20% menos, para la franja de entre 200.000 y 250.000 euros el recorte será del 40%, se extenderá al 70% para aquellos casos de entre 250.000 y 300.000 euros, y más allá no recibirán ninguna.

Por esa misma unidad de acción aboga Fernández Vara, dado que está en juego el desarrollo de Extremadura, apuntó, y porque "no hay nada que mas le interese a Europa que saber que las voces que vienen de los estados miembros son diversas y están desunidas". Para el líder socialista, en el borrador hay cuestiones "preocupantes" como la reducción del presupuesto (no llegará a 5.000 millones), que las ayudas pasen a ser "patrimonio del propietario" en detrimento del que "trabaja la tierra" y con esa reforma "cualquiera puede ser agricultor, solo se exige tener el 5% de tus ingresos procedentes del campo"; la falta de políticas de empleo; o la inclusión de ese techo de 300.000 euros para ayudas, que ha calificado como "excesivo".

El líder socialista extremeño se reunió ayer con dirigentes de la organización agraria UPA-UCE, que comparte estas inquietudes y también cree excesivo ese tope en las ayudas. Su secretario regional, Ignacio Huertas, indicó que con el modelo propuesto "se prima más al que más tiene y lo hace discriminando negativamente al que trabaja y al que tiene la explotación". Además, recalcó, el "pago básico" (una ayuda lineal por hectárea) supone "una transferencia brutal de presupuestos entre territorios, pero sobre todo de entre explotaciones", algo que puede hacer "que se pase de alrededor de 17 millones de derechos que tenemos en este momento en toda España a 24 millones de derecho con menos presupuesto", lo que hará que el agricultor cobre menos dinero y no tenga la capacidad de contratar otras superficies porque "todas van a estar ligadas a una ayuda".

Al margen de estas consideraciones, el borrador apuesta por acabar con los llamados derechos históricos que benefician a países como España y Francia; y aboga por un desarrollo agrario más verde, primando a los productores que hagan más esfuerzos a nivel medioambiental, ya que sopesa que un 30% de las ayudas directas se dirijan a compensar estas prácticas.

Desde PSOE e IU insistieron en que la PAC debe servir para garantizar las rentas de agricultores y ganaderos; e IU pide además porque la región esté libre de transgénicos, sobre todo tras el problema detectado con la miel en Alemania.