EL CENTRALES nucleares españolas se someterán a unas pruebas de estrés adicionales impuestas por el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) y que van "más allá" de las acordadas por el conjunto de la Unión Europea, con el objetivo de establecer los requisitos para mitigar las consecuencias derivadas de un ataque externo, como por ejemplo, el impacto de un avión comercial o de una explosión, pero sobre todo, del incendio que esto pudiera provocar. Así lo ha explicado en la presidenta del CSN, Carmen Martínez Ten, quien dijo que esta segunda Instrucción Técnica Complementaria (ITC) adicional a la europea, es de obligado cumplimiento para las plantas atómicas españolas. La UE obliga a pruebas de estrés ante terremotos, tsunamis o inundaciones por rotura de presas. La central que no las supere se cerrará.