José Luis Quintana afirmó que si llueve en el plazo de diez o quince días el año agrícola podría salvarse, y restó credibilidad a las cifras sobre pérdidas por la sequía que manejan algunas organizaciones agrarias. Según señaló, los daños de los que se habla a nivel estatal se centran en cítricos y el sector hortícola, que en Extremadura tiene un peso escaso. De todos modos, sí reconoció que la situación en la ganadería es más preocupante.

POSIBLES LLUVIAS Por su parte, Miguel Leal se mostró algo más pesimista, y comentó que la sequía ya está afectando a la ganadería y a ciertos cultivos de las Vegas Bajas, y que puede perjudicar notablemente a los pastos y a los cereales de invierno.

Asimismo, indicó que hay labores agrícolas que no se han podido realizar aún porque se necesita antes que llueva.

Respecto a esta cuestión, el director del Centro Meteorológico de Extremadura, Adolfo Marroquín, indicó ayer que hay posibilidades de que durante el fin de semana lleguen las precipitaciones a la región, aunque no serían muy intensas. Marroquín explicó que el anticiclón que se ha fijado frente a las costas lusas se está debilitando por el sur, y eso puede abrir paso a las lluvias.