Extremadura es la segunda región productora de corcho de España, con una media de 23.400 toneladas anuales, cantidad que podría incrementarse a partir de 2040, con unas 9.160 toneladas más al año, debido a la entrada en producción de las repoblaciones de alcornoque realizadas en los últimos 25 años.

En el año 2048 se alcanzaría una cifra récord, con una producción de corcho en plancha -el que utiliza la industria del tapón- que duplicará a la actual, de 52.400 toneladas, pues será el año en el que entren en producción las repoblaciones del año 1996, en el que se realizó una repoblación de más de 4 millones de alcornoques.

Estos datos han sido aportados por el director del Centro de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de Extremadura (CICYTEx), Germán Puebla Ovando, durante su ponencia hoy en unas Jornadas Técnicas de Corcho, en la localidad francesa de Plan de la Tour, en la que participan representantes de instituciones y centros de investigación de los 7 países con producción de corcho del mundo: Francia, Italia, España, Portugal, Argelia, Marruecos, y Túnez.

En estas jornadas se analizarán también los métodos de regeneración de alcornoque y las perspectivas económicas en el sector corchero.

Para realizar las estimaciones de producción de corcho de las próximas décadas, CICYTEx ha tenido en cuenta las repoblaciones de alcornoque realizadas en los últimos años en Extremadura, en su mayoría, cofinanciadas por la Unión Europea, con las ayudas para la forestación de tierras agrarias.

Los datos facilitados por la Dirección General de Política Agraria Comunitaria de la Consejería de Agricultura recogen que son 200 y 600 pies de alcornoques y mixtos por hectárea en los últimos 20 años.

Estas repoblaciones representan 72.000 hectáreas que son objeto de ayudas de forestación de tierras agrarias.

Germán Puebla ha explicado que se observa una buena evolución de estas repoblaciones, aunque la producción también estará en función de las buenas prácticas fitosanitarias y de gestión que se apliquen tanto en las repoblaciones como en la dehesa extremeña.

El primer corcho, denominado bornizo, sólo se puede obtener cuando la circunferencia del tronco del árbol, a la altura del pecho, es superior a 70 centímetros.

En la región los turnos de descorche suelen ser cada nueve o diez años; el corcho bornizo se saca, aproximadamente, a los 40 años de vida del alcornoque, el corcho segundero a los 49, y el corcho de plancha, el que utiliza la industria corchera, en torno a los 58 años.

Se espera que las ayudas para la mejora y la regeneración de terrenos adehesados, convocadas este año por la Consejería de Agricultura para el periodo 2013-2015, incremente aún más el número de repoblaciones de alcornoques a partir de este ejercicio, datos que cómo aún se desconocen, no han sido incluidos en esta estimación realizada por CICYTEx.