La portavoz de la Junta de Extremadura, Isabel Gil Rosiña, ha destacado "la absoluta normalidad" con que se está desarrollando ayer y hoy la prueba de evaluación de 6º de Educación Primaria, en la que participan 10.443 alumnos de 456 centros sostenidos con fondos públicos.

Gil Rosiña ha valorado el desarrollo de esta prueba que se realiza de acuerdo a los criterios establecidos por la Junta pese al requerimiento del Ministerio de Educación por no ajustarse a la normativa estatal.

Ha explicado que ayer, 13 de junio, se realizaron las pruebas de evaluación del grado de dominio de las destrezas de compresión escrita y oral, expresión escrita de la competencia en comunicación lingüística en lengua castellana y en lengua extrajera, en inglés.

Hoy martes se están realizando las pruebas de evaluación de competencia matemática, ciencia y tecnología.

La prueba se realiza, según Gil Rosiña, bajo la "supervisión de los servicios provinciales de inspección" de Cáceres y de Badajoz y la misma dará lugar a "un informe individual y privado para las familias, que no tiene ninguna consecuencia académica".

Ha indicado que cuando los directores de los centros establezcan con los profesores del claustro la forma de evaluación, como indicaba la instrucción de la Consejería de Educación, ésta "se sube a la plataforma Rayuela e irán llegando a la Comisión de Seguimiento e inspección educativa".

Gil Rosiña ha aprovechado su intervención para incidir en la necesidad de alcanzar "un gran acuerdo por la educación" en el país que evite "disputas" entre los gobiernos autonómicos y el de España, y que garantice una regulación "consensuada" y que se pueda evaluar para conocer si ha dado los resultados esperados.

"Va a haber una generación de españoles que han pasado por dos, tres y cuatro legislaciones educativas y eso es una locura", ha apostillado la portavoz de la Junta, al tiempo que ha recordado que, como dice el presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara, "la educación es la caja negra de la sociedad".