En Francia nadie se había atrevido a preguntarle. Pero en la visita de Nicolas Sarkozy ayer a Londres, los periodistas sacaron a relucir sus presuntos problemas matrimoniales con Carla Bruni, esto es, que el presidente francés tiene un affaire con la secretaria de Estado de Ecología, Chantal Jouanno, y la primera dama está liada con el cantante Benjamin Biolay. "Claramente, usted no sabe lo ocupado que está el presidente de la repú-blica, pero no tengo un segun-do, ni medio siquiera, que per-der en esas elucubraciones", respondió al reportero. "Incluso me pregunto", dijo, "cómo pierde el tiempo en hacer una pregunta tan idiota". Cuando un segundo periodista insistió en los rumores, Sarkozy le ignoró.