Las cinco enfermeras búlgaras y el médico palestino condenados en Libia a cadena perpetúa acusados de contagiar el sida a más de 400 niños han sido liberados esta mañana y ya han llegado a Sofía a bordo de un avión francés. El presidente búlgaro, Georgi Parvanov, ha indultado a todos ellos poco después de que aterrizaran en la capital del país.Los seis profesionales sanitarios han aterrizado en Sofía en un avión oficial francés, ha indicado el portavoz del Elíseo, David Martinon. En el aparato iban también la mujer del jefe del Estado francés, Cecilia Sarkozy; la comisaria europea de Relaciones Exteriores, Benita Ferrero-Waldner, y el secretario general del Elíseo, Claude Guéant.La mediación de FranciaLos tres habían llegado el pasado domingo a Trípoli para intentar cerrar las negociaciones sobre la liberación de los seis profesionales sanitarios, en las que había intervenido últimamente el presidente Nicolas Sarkozy. La pasada semana las autoridades francesas habían anunciado que el dirigente francés viajaría a Libia, un desplazamiento que los libios esperaban para mañana pero cuya fecha estaba suspendida a la espera de que se resolviera la situación de las enfermeras.Sarkozy estuvo ayer en contacto telefónico con el líder libio, Muamar Gadafi; con el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, y otra con el presidente búlgaro, Georgui Parvanov.La emisora de radio France Info había indicado que Gadafi tenía interés en que en la conclusión del contencioso sobre las enfermeras y el médico apareciera Francia como protagonista, con vistas a la firma de una "alianza estratégica" con un fuerte contenido económico.El ofrecimiento de la UELa Unión Europea (UE) ha ofrecido a Libia su ayuda para combatir el sida, modernizando tecnológicamente el centro pediátrico de Bengasi donde ocurrió la infección de 438 niños libios, de los que 56 fallecieron.Los seis cooperantes fueron condenados a muerte en dos ocasiones, pero la pena capital fue conmutada el pasado martes por la de cadena perpetua por el Alto Tribunal de Justicia libio (ATJ), un organismo dependiente del Ministerio de Justicia. Las familias de las víctimas han recibido un millón de dólares (unos 725.000 euros) de indemnización cada una.