Las autoridades libanesas han declarado este martes "zona catastrófica" el barrio beirutí de Hay al Sellom a causa de las lluvias torrenciales que han azotado el país desde el sábado, que han provocado el desbordamiento del río Al Ghadir, que ha convertido la zona en un estanque y ha sumergido bajo medio metro de agua y barro viviendas y tiendas del barrio.
Hasta el momento han fallecido cuatro personas y otras 55 han resultado heridas en el país a causa de las lluvias torrenciales, según datos proporcionados por la Cruz Roja de Líbano.
El ministro de Obras Públicas y Transporte, Ghazi Aridi, ha indicado que "no se puede controlar la situación con los medios convencionales a causa de que las lluvias no se han detenido". "Todos los ministerios han de utilizar todas sus capacidades, ya que se trata de una tormenta extraordinaria", ha argumentado.
Aridi ha manifestado además que el Consejo para el Desarrollo y la Reconstrucción ha trazado un plan para intentar evitar que este tipo de situaciones se repita. "A pesar de que este asunto no cae bajo nuestra jurisdicción, he estado siguiendo el asunto en solidaridad con la gente", ha apostillado, según ha informado el diario libanés 'An Nahar'.
En la ciudad de Tiro (sur), carreteras, campos e instalaciones turísticas han sufrido daños, especialmente en los alrededores del puente Teir Filsay y el río Litani. Asimismo, las actividades en el puerto se han visto detenidas por segundo día consecutivo a causa del estado del mar.
La región de Arbin está también entre las afectadas, y la biblioteca de la localidad de Arbin ha visto como la inundación ha destruido alrededor de 10.000 libros de su fondo documental. Además, una pared de seis metros de alto y cien metros de largo ha colapsado en la región de Al Dinniyeh cerca de la catarata de Aasun, provocando cortes de tráfico.
