El presidente de EEUU, George Bush, ha llegado a Bagdad en una visita sorpresa y mantenida en el más estricto secreto, para reunirse con el nuevo primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, y las tropas estadounidenses. Según ha informado hoy la Casa Blanca, tras confirmar la llegada presidencial, Bush permanecerá en el país árabe durante más de cinco horas.Los preparativos de la visita se habían desarrollado en el más absoluto secreto, hasta el punto de que el propio primer ministro iraquí ha recibido la noticia tan sólo unos pocos minutos de la llegada del mandatario estadounidense. Acompañan al presidente, entre otros, el jefe de su gabinete, Josh Bolten; el consejero de Seguridad Nacional, Stephen Hadley, y el portavoz, Tony Snow.Segundo viaje a IrakSe trata de la segunda visita del presidente estadounidense a Irak desde el comienzo de la guerra, en marzo del 2003. En noviembre de ese año también se desplazó por sorpresa para compartir el día de Acción de Gracias con los soldados estadounidenses.Según la agenda oficial, el presidente debía continuar hoy una sesión de trabajo en Camp David (Maryland) con sus principales asesores militares y civiles para evaluar el futuro de Irak tras la toma de posesión del nuevo Gobierno y la muerte del terrorista Abu Musab al Zarqaui, líder del grupo Al Qaeda en Irak. La agenda oficial indicaba que Bush tenía previsto celebrar una teleconferencia con sus asesores y los principales dignatarios iraquís.Antes de la llegada de Bush, el aeropuerto de Bagdad había quedado completamente cerrado al paso del tráfico tanto de vehículos como de personas con el argumento de la llegada de "una importante personalidad", ha asegurado la cadena de televisión CNN.