Un avión militar iraní, con 302 personas a bordo, se estrelló ayer en el sureste del país. Según las primeras informaciones de la televisión iraní no hubo supervivientes.
El aparato, un Antonov de fabricación rusa, cubría el trayecto entre las ciudades de Zahedan y Kerman. Mientras sobrevolaba la región de Chahdab, cerca de su destino en Kerman, desapareció del radar, según Irna, la agencia oficial de noticias iraní. Un funcionario del Gobierno apuntó el mal tiempo como probable causa del accidente.
