Colombia se dispone, ahora sí, a entrar de lleno en la carrera para las presidenciales del próximo 30 de mayo. A pesar de que la campaña electoral arrancó oficialmente el pasado mes de enero, todo el país estaba pendiente del dictamen de la Corte Constitucional sobre si permitía o no al actual presidente, Alvaro Uribe, presentarse a la reelección. La decisión, hecha pública el viernes, ha dejado a Uribe fuera de la contienda. "Acato y respeto la sentencia de la Honorable Corte Constitucional", dijo un resignado Uribe, que pretendía que los colombianos decidieran su futuro a través de un referendo.

Para los analistas, el dictamen es un hecho histórico. "Colombia está probando una vez más que es un país de instituciones, que tiene un Estado de Derecho y un poder judicial autónomo", dijo ayer a la agencia Efe el analista político Jaime Castro.