El clérigo radical Abu Bakar Bashir, líder espiritual del brazo de Al Qaeda en el sudeste de Asia y relacionado con los atentados de Bali de 2002, fue hoy detenido en Indonesia por su implicación de actividades terroristas. La Policía acusa a Bashir de estar vinculado a la red terrorista desmantelada este año en la provincia de Aceh, al norte de la isla de Sumatra, después de descubrir su campo de entrenamiento, indicó el portavoz policial, Edward Aritonang. "Él la bendecía y financiaba. Estaba al tanto de todas las actividades de (la red de Aceh) porque recibía informes desde el terreno", explicó Aritonang en rueda de prensa.

Según la versión policial, el clérigo radical desempeñaba también un "papel clave" en la designación de los "ustadz" o instructores religiosos y de los líderes del campo de entrenamiento, que a su vez le mantenían informado. Entre ese grupo se encontraba Dulmatin, el jefe terrorista que participó en los atentados de Bali de 2002, quien tras contribuir al montaje de las instalaciones se dio a la fuga y murió el pasado marzo durante un tiroteo con la Policía.

El ministro coordinador para Asuntos Políticos, Legales y Seguridad, Djoko Suyanto, y el jefe de investigación de la Policía, Ito Sumardi, subrayaron cada uno por separado, que la detención de Bashir se sustenta en "las fuertes pruebas" que le vinculan con la red terrorista de Aceh, aunque no facilitaron más detalles. A su llegada al cuartel general de la Policía, el clérigo aseguró a los periodistas que su detención era "una maquinación americana" y parte de su destino por "la gracia de Alá". La unidad antiterrorista Densus 88, detuvo al clérigo en Ciamis, una pequeña localidad del oeste de la isla de Java, en el suroeste de Indonesia, cuando efectuaba una gira por diversas mezquitas de la región para fomentar sus ideas radicales

Según fuentes policiales, en este operativo antiterrorista fueron detenidas otras cinco personas del séquito que acompañaba a Bashir, aunque no han trascendido sus identidades. El clérigo radical, encarcelado 26 meses por instigar el atentado de Bali en el que murieron 202 personas, estaba desde hacia varios meses en el punto de mira de las fuerzas de seguridad indonesias por su supuesta relación con la red terrorista que se estableció en la conservadora Aceh, y de la que han sido detenidas decenas de personas.

Bashir, de 72 años, ha sido relacionado con varias de las figuras más destacadas de los movimientos islamistas de la región, entre las que sobresale Noordin Mohamed Top, el terrorista más buscado en el Sudeste Asiático y muerto a tiros en 2009 en una operación policial llevada a cabo después de que organizase el atentado perpetrado en julio en Yakarta, en el que murieron nueve personas.

Bashir es el fundador de la polémica madrasa o escuela islámica "Ngruki" de la ciudad javanesa de Solo, considerada una cantera de islamistas en la que se formaron tres de los indonesios radicales ejecutados por los atentados de Bali y otros cinco integristas, de los que tres han muerto en distintos atentados suicidas. En más de una ocasión, Bashir ha acusado a los servicios de inteligencia de Estados Unidos de estar detrás de algunos de los atentados islamistas perpetrados en suelo indonesio. El arresto se produjo dos días después de que las fuerzas de seguridad indonesias anunciasen que habían desmantelado un plan para atentar contra el presidente del país, Susilo Bambang Yudhoyono, aunque por el momento las autoridades no han establecido una vinculación directa entre ambas operaciones.

La Yemaa Islamiya (YI), eslabón de Al Qaeda en el Sudeste de Asia, fue fundada en 1995 para crear un califato islámico en Indonesia, Malasia, Singapur y el sur de Filipinas y de Tailandia, y es responsable de la mayoría de atentados perpetrados en la región. En la actualidad, sin embargo, la organización atraviesa una etapa de divisiones internas entre los militantes que apoyan el terrorismo para alcanzar este fin y aquellos que rechazan la violencia, especialmente si afecta también a indonesios musulmanes.