Los más madrugadores, entre ellos algunas agencias especializadas en tráfico de datos personales, las vendían por algunos miles de euros, porque gratis ya no se podían obtener. Pero a media tarde de ayer fueron colgadas en el programa eMule de internet, a disposición de cualquiera. Son las listas de las declaraciones de la renta del 2005 de todos los contribuyentes italianos, puestas el miércoles en la red por Hacienda Pública y bloqueadas a media tarde del mismo día por la agencia de protección de datos, a causa de las protestas de algunas asociaciones de consumidores y del mundo político.

Sin embargo, es suficiente entrar en eMule, introducir el código fiscal de las ciudades italianas (H501 para Roma), o "p-2005" para todas ellas, y buscar a la persona deseada entre las 38,5 millones de declaraciones.

EL MAS RICO El contribuyente más rico de Roma es Giancarlo Giglio, de 67 años, con 13,5 millones de euros de renta. El famoso jugador del Roma, Francesco Totti, ocupa el tercer lugar, con 10 millones.

Los internautas italianos han ido más allá, bajando los ficheros de Hacienda y colocándolos en numerosos portales, al tiempo que han aplaudido la iniciativa del viceministro de Hacienda, Vincenzo Visco, que la próxima semana, tras la victoria electoral de los conservadores, dejará el cargo como todo el Gobierno de Romano Prodi. "Se trata de un hecho muy normal de transparencia y democracia", se ha defendido el viceministro, que en dos años de Gobierno se ha especializado, con éxito, en la caza de los evasores fiscales.

Una ley italiana de 1973 considera las declaraciones de la renta como públicas y permite a cualquiera acceder a ellas, a través de los ayuntamientos o de la Administración central, previa identificación. Para darles mayor publicidad, Hacienda empezó a divulgarlas a principios de los 80, pero interrumpió esta práctica poco después. "Los ciudadanos interpretaban que se trataba de la lista de los evasores", explicó Rino Formica, exministro socialista de Hacienda.

CLAMOR La diferencia, que tuvo en cuenta la agencia de protección de datos el miércoles, es que entonces internet no existía y las listas acababan en los diarios, que publicaban una selección de los más famosos. Pese a los aplausos de los internautas, se ha alzado un clamor en contra de Visco, a quien el diario La Stampa ha acusado de haber "dado un coletazo innecesario, antes de abandonar el ministerio".

"La venganza es un plato que, notoriamente, se sirve frío", ha subrayado el Corriere della Sera . Renato Schifani, el nuevo presidente del Senado, dijo ayer que "de esta manera se corre el riesgo de crear tensiones sociales dentro de categorías enteras". Luigi Angeletti, secretario del sindicato centrista UIL, comentó que "los únicos que están tranquilos son los evasores, porque no figuran en las listas".

Las asociaciones de consumidores se han dividido con respecto a este tema. Mientras tres de las cinco principales se oponen, una cuarta aprueba la medida y otra considera que "la transparencia es justa", pero que "colgar los datos en internet expone a millones de ciudadanos al hurto de identidad, embrollos y estafas". El portalredditodelvicino.com (la renta del vecino), iniciado ayer, está cosechando grandes éxitos.