Al final no hubo comunicado conjunto en Gaza, El Cairo y Ramala. Ni siquiera hubo un texto consensuado por todas las facciones palestinas. Primero fueron los dos grupos islamistas, Hamas y la Yihad Islámica, quienes ayer anunciaron el inicio de una tregua de tres meses con Israel, sujeta a una serie de condiciones que el Gobierno de Ariel Sharon debe cumplir. Al Fatah, el partido presidido por Yasir Arafat, no se sumó por diferencias con el redactado final del comunicado, pero horas después hizo pública su propia declaración de tregua que, según fuentes palestinas citadas por la prensa israelí, será de seis meses.

Por parte israelí hubo también gestos positivos. El anunciado repliegue del norte de la franja de Gaza empezó a materializarse al anochecer. Testigos presenciales vieron cómo una serie de vehículos blindados abandonaban la población de Beit Hanun, al norte de la franja, en dirección a la frontera con Israel.

Como se había filtrado, la tregua de las facciones islamistas es general --suspende los ataques en Israel, y en Gaza y Cisjordania--, limitada --su duración es de tres meses-- y condicionada, ya que impone al "enemigo sionista" una serie de exigencias, básicamente el fin de los ataques contra los grupos de resistencia, levantar el asedio de Arafat y la liberación de los presos palestinos.

Las exigencias son ciertamente difíciles de asumir por Israel, pero no se trata de precondiciones, ya que la tregua entró en vigor ayer mismo, sino de una especie de puerta abierta para que ambas facciones puedan romper el alto el fuego en cualquier momento.

Las Brigadas de Mártires de Al Aqsa --brazo armado de Al Fatah-- no rubricaron el comunicado por disputas internas. Pero fuentes de Al Fatah lo dejaron claro al decir que apoyan la tregua. El anuncio oficial llegó al anochecer.

Israel reiteró ayer su postura contraria al alto el fuego. El Gobierno hebreo opina que la tregua es una trampa de las facciones armadas para rearmarse. "Repito lo que el ministro de Exteriores Silvam Shalom ha dicho a Condoleezza Rice: este alto el fuego es una bomba de relojería porque mantiene las infraestructuras del terror", dijo el portavoz israelí, Gideon Meir.

VISITA DE RICE

La consejera de Seguridad Nacional de EEUU escuchó estas palabras de boca de Shalom en su ronda de reuniones, ayer en Jerusalén, con el Gobierno de Sharon. El ministro de Defensa, Shaul Mofaz, le explicó que Arafat trata de sabotear a Abu Mazen y Sharon presentó a Rice los detalles del repliegue de Gaza y las medidas decididas para mejorar la situación de la población palestina.

Sin embargo, Rice criticó, en una reunión con el gabinete de seguridad israelí, el muro de separación entre Israel y Cisjordania, ya que Washington lo considera un intento de establecer una frontera política sin negociación que no respeta la línea verde .