Un hombre aparentemente desquiciado y armado con un kalashnikov ha matado este jueves a tres personas y herido a una cuarta en la cabeza tras dispararles en plena calle en Istres, a 20 kilómetros al oeste de Marsella (Francia).La policía ha arrestado al supuesto asesino, de 20 años, cerca del sitio del tiroteo. El joven tiene un historial de enfrentamientos menores con las autoridades, en particular por posesión de armas prohibidas, según han explicado fuentes policiales de Marsella.

Aparentemente, las víctimas fueron elegidas al azar por el sospechoso, que supuestamente padece un desequilibrio mental y no había tenido contactos previos con ninguna de las víctimas.

"Parece ser que esta persona tenía un arma de gran calibre, un kalashnikov, y disparó a la multitud", ha declarado el ministro del Interior, Manuel Valls, a los periodistas en París. "Es una situación muy preocupante y demuestra una vez más el problema de las armas en circulación", ha añadido Valls.

La segunda ciudad más importante de Francia ha sufrido en los últimos tiempos un incremento de los tiroteos relacionados con el narcotráfico, en el que la afluencia de armas procedentes del este de Europa tras las guerras balcánicas ha contribuido al crecimiento de la violencia armada.