EEUU estima que la reconstrucción de Irak costará 18.000 millones de euros (casi 3 billones de pesetas) anuales.
¿QUIEN PAGARA
LA FACTURA BELICA?
En esta cantidad se incluye el despliegue en la posguerra de 75.000 soldados, en principio estadounidenses, como fuerza de ocupación, además de primeras inversiones en la reconstrucción de las infraestructuras destruidas por las tropas invasoras.
Pero si no hubo unanimidad para enviar tropas, menos la hay para pagar la factura. Especialmente si se tiene en cuenta que "en los primeros años, los ingresos por petróleo serán insuficientes" para cubrir los gastos, como vaticinó el miércoles James Schlesinger, que trabajó para los presidentes Gerald Ford y Richard Nixon.
Fuentes de la Administración de Bush han dado a entender que la Casa Blanca tiene intención de solicitar al Congreso entre 50.000 y 85.000 millones de euros. No se trata de un desinteresado plan, sino que apenas oculta la pretensión de garantizar que EEUU asuma en exclusiva el papel que el frente de la paz quería haber reservado para las Naciones Unidas.
SUCULENTOS CONTRATOS
PARA EMPRESAS DE EEUU
Como si Irak fuera un protectorado de EEUU, la Agencia para el Desarrollo Internacional (USAID) adjudicó a dedo a empresas de ese país los ocho contratos de reconstrucción que se estimaban más urgentes. Los montantes de las operaciones oscilan entre los 4,25 millones de euros adjudicados a Stevedoring Services of America para la gestión portuaria, a los 600 millones que irán a parar a las arcas del grupo Bechtel. Se da la paradoja de que este último grupo empresarial con sede en San Francisco está vinculado con las finanzas de la familia del terrorista saudí Osama bin Laden. La adjudicación sin licitación pública de esos contratos ha suscitado una agria polémica en EEUU.
BUSH DIJO: "EL PETROLEO
IRAQUI, PARA LOS IRAQUIS"
La controversia alcanzó el clímax con la concesión a una filial de Halliburton, grupo dirigido por el vicepresidente Dick Cheney entre 1995 y 2000, de un contrato para la extinción de los incendios en los pozos de petróleo iraquís por 6.200 millones de euros. Por este contrato se supo el miércoles que el Ejército de EEUU incluyó --además de la extinción de los incendios-- la explotación y distribución del crudo iraquí, haciendo caso omiso de las palabras de Bush: "El petróleo iraquí será para los iraquís". Y es que el botín se lo merece: 23.000 millones de euros al año en crudo, a pleno rendimiento.
