El presidente paquistaní, Pervez Musharraf, dijo ayer que quiere aprobar un paquete de medidas legales para mejorar la situación de la mujer en Pakistán, un país islámico conservador donde rige una legislación machista. El primer paso fue la ratificación presidencial de la ley que facilita la persecución judicial de los autores de una violación.

La nueva norma, denominada ley de protección de las mujeres, elimina la legislación que establecía que una mujer violada debía presentar como mínimo cuatro testigos para que el autor pudiera ser juzgado. La reforma suprime también la pena de muerte por mantener relaciones sexuales extramatrimoniales, si bien puede castigarse con penas de 130 euros de multa a cinco años de cárcel. Musharraf avanzó otros proyectos de ley favorables a la mujer, como el de evitar matrimonios forzosos.