La presidencia italiana de la UE rechazó ayer en el Parlamento Europeo reabrir el compromiso institucional del borrador de Constitución europea, en contra de las aspiraciones del Gobierno español y de los planteamientos de la Comisión Europea. Ese pronunciamiento obtuvo el respaldo de los principales grupos de la Eurocámara y del presidente de la Convención que elaboró el borrador de Constitución, Valéry Giscard d´Estaing. El debate sobre la Conferencia Intergubernamental, que el 4 de octubre iniciará la negociación final de la futura Constitución, evidenció el aislamiento del Gobierno de José María Aznar, incluso entre sus aliados, como Italia, en su intento de mantener el poder obtenido por España en Niza.

Giscard señaló que el borrador de Constitución "va tan lejos como es posible ir en el estado de la Europa actual". Si se intenta ir más allá, se romperá el consenso europeo, previno.