El presidente francés, Nicolas Sarkozy, propuso ayer a los demás líderes del G-8 dar un plazo adicional de seis meses para encontrar una solución negociada al estatuto final de Kosovo. "He propuesto que, primero, el presidente ruso, Vladimir Putin, reconozca la perspectiva ineluctable de la independencia de Kosovo. Y que al cabo de seis meses, o bien Belgrado y Pristina encuentran un estatuto mejor o se aplica el propuesto por el enviado especial de la ONU, Matii Ahtisaari", dijo Sarkozy.

Ahtisaari aconsejó una independencia tutelada de Kosovo, pero Serbia la rechaza con apoyo de Rusia. Sarkozy dijo que "se crearía una situación muy difícil" si se propone una resolución que choque con el veto ruso.