Un total de 17 trabajadores de los 28 despedidos por el Ayuntamiento de Mérida presentaron ayer en el registro municipal las reclamaciones individuales contra esta decisión y anunciaron que recurrirán a la vía judicial si en 30 días el Gobierno local no las resuelve favorablemente. Estas 17 personas han acudido al registro municipal acompañadas de representantes de CCOO, sindicato al que han recurrido para que se encargue de representarlos en este proceso.

En la entrega de los recursos, el delegado de CCOO Juan Luis Lancho explicó que esos despidos son "nulos o subsidiariamente improcedentes", y que los mismos son un "efecto" del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que, subrayó, "el propio ayuntamiento retiró el pasado 9 de abril" porque "no había causa".

Los trabajadores piden en sus reclamaciones que se les readmita y se les abonen los salarios que han dejado de percibir desde el 16 de abril, día en que se formalizaron los despidos. Lancho precisó que en todos se han "vulnerado derechos fundamentales" de los empleados como el de "la representación efectiva" y que se trata de "despidos colectivos" que "obligatoriamente" tenían que haber sido negociados con la representación legal de los trabajadores.

SIN COMUNICACION En esta línea, ha denunciado que "no existe negociación ni comunicación" en el Ayuntamiento de Mérida y ha criticado que la última vez que se reunieron fue el pasado 27 de marzo. Para el sindicalista de CCOO, resulta un "atropello" que el gobierno local eche a 28 trabajadores y, en cambio, busque una "solución rápida" a los dos consejeros municipales Manuel Balastegui y Oscar Baselga al reubicarlos como asesor de alcaldía y coordinador de relaciones institucionales, respectivamente, en cumplimiento de la sentencia del Tribunal Constitucional que anula la opción de nombrar consejeros municipales no elegidos en las urnas. Respecto al resto de trabajadores, hay dos personas afectadas que, según Lancho, no van a reclamar y mientras que el resto también han emprendido las acciones oportunas contra el Consistorio emeritense.

Los empleados afectados por estos despidos --que tenían un contrato por obra y servicio que, según Lancho, pasó a indefinido-- pertenecían a las áreas de Obras, Deportes, Servicios Sociales y Turismo, en ésta última ocho personas. El sindicalista aseguró que la calidad en la prestación de estos servicios se ha visto mermada, al tiempo que consideró una incongruencia que el gobierno local defienda al turismo como motor económico de la ciudad pero a la vez despida a estos empleados.