Un hombre fue ayer atropellado en la zona semipeatonal de la Rambla de Santa Eulalia, sin causarle heridas por la escasa velocidad con que circulaba el coche, pero provocándole una caída que generó la indignación de numerosos ciudadanos que presenciaron lo ocurrido, por la actitud de la conductora.

Según el transeúnte, pasaba por la zona cuando escuchó un claxon y, sin saber de qué vehículo procedía, fue arrollado por un BMW conducido por una mujer de más de 60 años, vecina de la zona. Esta alegó que había pitado para que el peatón se apartara, ante lo que este continuó su camino "con tranquilidad", y, cuando el coche iba a su lado, "se echó encima". El afectado cursó una denuncia ante la Policía Local por "conducción temeraria", que puede conllevar una multa de 500 euros y la pérdida de seis puntos del carnet.