Los delitos contra la libertad e indemnidad sexual cometidos en Mérida continúan al alza. Según el balance de criminalidad dado a conocer por el Ministerio del Interior, relativo al segundo trimestre de 2019, en los primeros seis meses del año ya se han registrado en la ciudad nueve infracciones de esta índole, las mismas que se contabilizaron durante todo el pasado año, cuatro de ellas en el primer semestre. En este sentido, resulta llamativo que los delitos sexuales han disminuido a nivel regional en un 3,3%, con 99 casos de enero a junio de este año, siete menos que el mismo periodo del año anterior.

De los nueve delitos sexuales que se han cometido en la ciudad en los primeros seis meses del año, uno fue por agresión sexual con penetración (violación), mientras que en todo el 2018 hubo dos de este tipo. Cabe señalar que este es el único delito sexual que aparece desagregado en el informe, ya que los ocho delitos restantes se incluyen en un epígrafe que engloba de forma conjunta el resto de los delitos contra la libertad e indemnidad sexual.

Marisa Tena, de la asociación de mujeres Malvaluna, sostiene que Mérida es una de las ciudades que más campañas pone en marcha contra la violencia sexista, un hecho que «puede incidir en que se presenten más denuncias», ya que se pone el foco en que la culpa no es de la víctima, sino del agresor. «Las campañas generan más confianza en quien sufre una agresión y se pierde el miedo y la vergüenza social a la hora de presentar denuncia», apunta.

En Mérida se registraron durante el primer semestre del año un total de 1.067 infracciones por quebrantamiento del Código Penal, siete menos que en el mismo periodo de 2018, año que cerró con 2.158 infracciones. El balance del Gobierno central está elaborado a partir de la información facilitada por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (policía nacional y guardia civil), y policías locales y autonómicas.

Salvo los delitos de tipo sexual, que aumentaron un 125% en el primer semestre del año con respecto al mismo periodo de 2018, y los robos con violencia e intimidación, que subieron un 21,4%, el resto de las infracciones recogidas por el informe experimentaron un descenso. Así, los robos con fuerza en domicilios, establecimientos y otras instalaciones bajaron de 63 a 57, y los robos con fuerza en domicilios, de 48 a 34. Por su parte, los hurtos cometidos en la ciudad registraron también un descenso, al pasar de los 279 contabilizados en el primer semestre de 2018, a los 246 desde el pasado enero a junio.