El Ayuntamiento de Mérida colaborará en la instalación de cámaras de vigilancia en el recinto del comedor social e intensificará la presencia de la Policía Local en la zona con el fin de mejorar la seguridad del centro y evitar posibles actos vandálicos, como los que se produjeron el mes pasado. El alcalde, Antonio Rodríguez Osuna, y las delegadas de Servicios Sociales y Educación, Mercedes Carmona y Silvia Fernández respectivamente, se reunieron ayer con los responsables y técnicos del comedor social Beato Cristóbal de Santa Catalina, situado en la antigua Hostería de Carcesa.

Al término del encuentro, el regidor ha trasladado el compromiso del consistorio con la mejora de la seguridad de este centro, el cual hace una "muy buena labor en la ciudad" y con el que la institución municipal "debe seguir colaborando" en todo lo posible, en este caso con cámaras de vigilancia y más presencia policial. Cabe recordar que los responsables del centro social, que actualmente da de comer a 90 personas, han presentado ya varias denuncias a la policía en los últimos meses, pues les han forzado la puerta, han roto ventanas y se han encontrado el contenedor de ropa usada en el suelo. El último suceso fue hace pocos días la quema de un contenedor lleno de maderas junto a una ventana del edificio.