Mérida ha pasado en poco más de un siglo de ser un pueblo de 30 hectáreas de superficie, a ser en la actualidad una ciudad de 950 hectáreas.

Así se recoge en el Plan Estratégico Local, un estudio en periodo de exposición al público que marcará el desarrollo de la ciudad en los próximos 25 años. El proyecto se encuentra en el patio de ayuntamiento y todos los ciudadanos pueden aportar sugerencias hasta septiembre.

Uno de los temas que trata el estudio es el desarrollo de Mérida. Así, señala que a medidos del siglo XIX era un pequeño núcleo urbano que se ceñía al casco antiguo de origen romano. No fue hasta el año 1854, con la llegada del ferrocarril, cuando la ciudad empezó a crecer por la margen izquierda del río Guadiana y al norte del río Albarregas, cerca de la carretera Mérida-Badajoz y de Cáceres, donde abrieron las primeras industrias.

La primera gran expansión fue de cien hectáreas y se produjo a principio del siglo pasado. La ciudad creció hacia el sur, ya que hacia al norte tenía como barrera el río Albarregas y la línea de ferrocarril.

En 1949 se elabora el primer Plan General de Ordenación Urbana y se empieza a construir fuera del casco urbano tradicional. Así nació la barriada de la República de La Argentina, promovida por el ayuntamiento.

También surgen urbanizaciones ilegales que luego serían barriadas, como Las Abadías, San Juan, Santa Isabel, San Agustín, Sant Antonio o San Andrés.

Respecto a los últimos cinco años, se ha desarrollado un proceso intensivo urbanizador y se espera que se completen todas las áreas de expansión del Plan General Urbano.