La asociación de vecinos de La Antigua ha criticado al gobierno municipal porque la ermita de la Antigua permanece cerrada "a cal y canto".

El alcalde emeritense, Pedro Acedo, cedió la ermita al arzobispado de Mérida-Badajoz pero, según afirman desde la asociación vecinal, el arzobispado no le da uso.

El colectivo vecinal pretende que la ermita sea cedida a los vecinos para que puedan desarrollar en ella algunas actividades de la barriada como la semana musical de Santa Cecilia y la instalación del Belén cuando se aproximen las fechas navideñas.

Además, señalan desde la asociación, el arzobispado ha solicitado unos 70 metros del entorno de la ermita, lo que, en palabras de los vecinos de la barriada, es inviable,. Esto es así, afirman en un comunicado, porque según la ley de patrimonio, las ciudades Patrimonio de la Humanidad no pueden tocar los monumentos ni su entorno.

La asociación de La Antigua invitó al equipo de gobierno municipal y en particular al alcalde a que se reuniesen para dialogar sobre este asunto porque, según su presidente Luis Valiente, lo único que se pretende es que "la ciudad funcione mejor".