No van a desistir en su petición. La asociación de vecinos de el Prado insiste en la necesidad de que se inicien los trámites para que la barriada pueda contar con una farmacia, al argumentar que la más cercana se sitúa a más de 2,2 kilómetros de las viviendas. Tras dar cuenta de esta demanda a la Consejería de Sanidad y Políticas Sociales, el colectivo vecinal espera ahora el apoyo del equipo de gobierno para que inste a la Junta a iniciar el procedimiento administrativo, al tiempo que no tendría inconveniente en rebajar sus pretensiones y «conformarse» con un botiquín farmacéutico en lugar de una oficina de farmacia.

El presidente de la asociación vecinal, Jaime Gil, reconoce a este diario que «el trámite para conseguir un botiquín farmacéutico es más sencillo que para una farmacia». Por ello, el responsable vecinal ha solicitado una reunión con el equipo de gobierno, con el objetivo de pedir una mediación ante la Junta que agilice los trámites para que el barrio pueda contar con este servicio de dispensación de medicamentos. «Espero que el equipo de gobierno lleve esto a pleno porque no deja de ser un trámite administrativo, en principio sencillo, y con un poco de voluntad política se podría convertir en realidad fácilmente», sostiene G¡l.

En este sentido, Gil agradece que el grupo municipal IU ya haya registrado una proposición ante el pleno para que el ayuntamiento solicite formalmente a la consejería el inicio de los trámites, no obstante, prefiere que sea el propio gobierno municipal al considerar que «todo sería más rápido». El presidente vecinal asegura que la barriada «estaría dentro de los parámetros de la ley para tener una farmacia», sin embargo, a corto plazo «nos conformamos con un botiquín farmacéutico porque creo que sería suficiente para los medicamentos que se suelen necesitar en el barrio».

las OPCIONES // Sobre este asunto, la consejería ha informado a este diario de que, tras recibir la petición vecinal, se les ha trasladado las posibles opciones para la prestación del servicio farmacéutico, que según la Ley de Farmacia de Extremadura serían dos. En concreto, la concesión de una nueva oficina de farmacia, que requeriría la convocatoria de un concurso público, «un proceso complejo y laborioso sólo planteable a largo plazo», o bien el traslado a esa zona de una de las oficinas de farmacia ya existentes en Mérida, que debería ser solicitado por su titular. En cualquier caso, la consejería ha pedido al presidente vecinal que, para avalar su solicitud, presente documentación oficial acreditativa de la necesidad de una farmacia pero, por el momento, no se ha recibido.

Para argumentar la petición, el colectivo vecinal señala que la barriada cuenta con unos 3.300 vecinos y la farmacia más cercana está a una distancia de 2,2 kilómetros, en la avenida de las Américas, lo que dificulta el acceso a sus vecinos de los servicios para la atención farmacéutica.