Céntrica y a la medida de los residentes. Así es la residencia de mayores La Consolación, en Cáceres. Dispone de 26 plazas, 24 de ellas de residentes y el resto de centro de día. La ubicación es uno de los principales atractivos de La Consolación. Se encuentra en el número 6 de la calle Clemente Sánchez Ramos, en pleno centro de la ciudad. Sus usuarios pueden disfrutar de todos los beneficios que ello conlleva. Hacen su vida normal, incluso van a sus propios domicilios, y se encuentran perfectamente atendidos por el completo equipo de profesionales de la residencia.

TRAYECTORIA Desde hace ya once años La Consolación se distingue por su esmerado servicio y el celo en el cuidado de los mayores. La gama de atenciones que se dispensan en La Consolación es amplia: Médico especializado en geriatría, enfermería (valoración y cuidados de enfermería integrales), terapia ocupacional (tratamiento y evaluación de pacientes, estimulación cognitiva y funcional en sesiones grupales e individuales), fisioterapia (rehabilitación física, funcional individual y grupal; psicomotricidad-gimnasia colectiva), podología, peluquería, farmacia y servicios religiosos. Las habitaciones son tanto dobles como individuales.

Fermina Sánchez, directora gerente de La Consolación, destaca de la residencia: "No es una residencia grande y se encuentra en pleno centro. Los familiares que viven cerca pueden visitar a los residentes con facilidad y éstos, que son autónomos, entran y salen con total libertad".

El servicio de comedor se adapta perfectamente a las necesidades de los ancianos, elaborándose menús ex-profeso para diabéticos o triturando la comida para aquellos que lo necesiten. De otro lado, los usuarios del centro de día disponen de un autobús concertado para llegar sin problemas a la residencia.

La Consolación tiene una acreditada y merecida fama por la calidad de los servicios que presta y el alto grado de satisfacción de sus residentes.